La macizorra australiana Savannah Bond es una auténtica locura y es normal que esté levantando tantas pasiones últimamente en el mundo del porno profesional. Con semejante cuerpazo en el que destacan sus grandes pechos y su hermoso culo, su cara de chica buena adicta a las pollas y lo bien que se le da follar delante de las cámaras, sus escenas siempre son sinónimo de éxito.