A la hora del sexo esta rubia no se pone límites, hasta el punto de fantasear con follarse a su propio abuelo. De hecho una tarde a solas con él, interrumpió su lectura para ir a por su polla y el abuelete no dudó en dejarse llevar. La verdad es que el señor no esperaba para nada la reacción de su nieta, que a pesar de su juventud y de su inexperiencia, fue capaz de provocarle una erección y de regalarle una follada que el viejo recordará para el resto de sus días.