Parece que la enfermera
Alexa Tomas es una golfa y de las grandes, tanto como para hacer su trabajo sin bragas y llamando la atención de todos los pacientes. Al primero que puso cachondo fue al doctor, al cual le regaló una buena mamada y luego, fue uno de los soldados de la base el que terminó follándosela hasta que el médico al verlos decidió unirse a la «fiesta» haciendo un trío para el recuerdo.