Abella Danger y su amiga Payton Preslee son dos zorras calientes a las que no les gusta controlar sus impulsos. Estaban pasando el día en la piscina ahora que ha llegado el buen tiempo y les entraron ganas de placer, así que sin cortarse un pelo, comenzaron a besarse apasionadamente, a tocarse y a comerse los coños, masturbándose mutuamente, hasta que llegaron al orgasmo más salvaje con el morbo añadido de estar al aire libre.