Las dos golfillas sabían que en breve un amigo en común se iba a pasar por casa a hacerles una visita, así que estas dos buenas amigas quisieron estar bien limpias para recibirlo con todos los honores. Se metieron en la bañera y la compartieron mientras poco a poco se iban poniendo cada vez más cachondas. Cuando el chico llegó y se las encontró así, no perdió el tiempo y sacó su polla a pasear para satisfacerlas en un trío brutal que hicieron por todo el baño.